Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
Juan 14:6
En días pasados leímos Juan 10:9 "Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos"
Solo un camino, una verdad, una vida, una puerta, un abogado, un mediador, un sacrificio perfecto, solamente uno.
Es nuestra labor llevar ésta verdad a este mundo engañado, diciéndoles: no hay otro lugar en el cual fijar nuestras miradas, solo hay un camino. En esta verdad está cimentada nuestra salvación y nos gozamos y aferramos a ella.
Hermanos no importando cuanto crezcamos en el conocimiento de la palabra, en el servicio para el Señor o en antigüedad como Cristianos, tengamos cuidado de no poner nuestra confianza en lo bien que luce nuestra "vida recta". Dios no nos acepta porque esta semana fuimos obedientes, nos acepta solo por medio de su Hijo (Tito 3:5). No caigamos en el mismo error del mundo, intentando fabricar más de un camino para llegar al Padre.
Este es el mensaje hermanos "...hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre,"
1 Timoteo 2:5