Juan 11:1-15

Como se ha venido mencionando en comentarios anteriores, la mayoría de los judíos no creían en el Señor Jesús aunque habían visto muchos de sus milagros pero al parecer no era suficiente para ellos. Por esto, El mismo dice (v.4) Esta enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella. Esto decía, dando a entender que aquél milagro llevaría las miradas y los corazones hacia el Padre, y en consecuencia al Hijo también. Dejando en claro que El es el Hijo de Dios.

En el evangelio de Juan podemos ver al Señor Jesús hablar del Padre y del Espíritu Santo (Juan 14:26), hermanos, es necesario aclarar que Dios es uno, este comentario surge porque hoy en día existen falsas enseñanzas, que niegan al Padre o al Hijo o al Espíritu Santo o tratan de hacerlos menos.

Cómo creyentes sanos del evangelio no debemos hacer caso de estás doctrinas, lo mejor es leer las escrituras, dónde sin duda encontraremos la verdad de las cosas. Santiago 2:19 dice: Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan.

Sea el Señor bendiciendo sus vidas y abriendo nuestro entendimiento al leer las sagradas escrituras para conocerle cada día más y no ser engañados.