Y daban buen testimonio de él los hermanos que estaban en Listra y en Iconio.
Hechos 16:2
Un claro ejemplo de la importancia del testimonio en la vida de un creyente lo fue Timoteo, que más adelante el apóstol Pablo le recuerda en una de sus cartas.
Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse , que usa bien la palabra de verdad. 2 Timoteo 2:15.
Por lo cual, es necesario que presentemos nuestras vidas delante de Dios de una manera agradable a Él, para que de esta forma el nombre de nuestro Señor sea glorificado en todo tiempo y por todos.
La palabra dice en: Mateo 5:16
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
Amados hermanos, es necesario que en verdad procuremos dar el mejor testimonio posible, no busquemos la excelencia en palabras (1 Corintios 2:1), sino que busquemos que nuestras vidas sean congruentes a lo que conocemos y compartimos, no importando que llevemos poco tiempo de conocer la palabra. Y al que sabe hacer lo bueno y no lo hace, le es pecado. (Santiago 4:17)
Como podemos comprender, es necesario hacer lo que es agradable delante de Dios, con esto no estamos afirmando que la salvación es por obras (Efesios 2:9). Las obras solo son una evidencia de que somos verdaderos hijos de Dios, por eso Santiago dice que la fe sin obras es muerta en sí misma. (Santiago 2:17)
Procuremos pues dar buen testimonio de Dios a través de nuestra vida.
Sea el Señor Jesús bendiciendo sus vidas.